Declaración de la Asociación Argentina de Profesores de Derecho Penal "Lo acontecido en Monte Hermoso no es otra cosa que una muestra clara de la escalada de intemperancia"

Declaración de la Asociación Argentina de Profesores de Derecho Penal

 disturbios en Monte hermoso
 Hace poco más de un año, en abril de 2014, ante la sucesión en diferentes  ciudades del país como Buenos Aires, Rosario y Mar del Plata de graves y descontroladas reacciones vindicativas, delitos contra la vida, la integridad personal y la propiedad que se presentan bajo el rótulo de “linchamientos”, la AAPDP a través de su Consejo Directivo puso de manifiesto su profunda preocupación por la aparición y expansión de este fenómeno reproductor de violencia que nos lleva a vivir como una comunidad pre-talional. Se recordaba en ese comunicado que hace casi cuatro milenios, en la Babilonia del rey Hammurabi, para frenar la barbarie de la venganza ilimitada por mano propia se consagró la “Ley del Talión”, que no decía simplemente “ojo por ojo y diente por diente”, sino “NO MÁS QUE ojo por ojo…”. Era un avance civilizatorio en que el Estado intervenía para poner límites a la reacción punitiva.
En aquel momento advertimos sobre los serios riesgos de desandar el camino recorrido y hacíamos un llamado a la comunidad que integramos y, singularmente, a todos aquellos que tienen u ostentan algún grado de representatividad popular, para el unánime repudio  e irrestricto apoyo tanto a las autoridades que tendrían la responsabilidad de juzgar aquellos hechos de violencia descontrolada y, en la mayoría de los casos, desmesurada. También expusimos nuestra adhesión a los que, desde distintos ámbitos, encabezaron acciones tendientes a restaurar una sana convivencia ciudadana y la paz social, propias de un Estado de Derecho. Lo acontecido en Monte Hermoso no es otra cosa que una muestra clara de la escalada de intemperancia: el linchamiento ha llegado al asesinato.
No es un hecho aislado, sino uno de los más graves que podía avizorarse y que enlaza con un contexto en que el descontento con actos institucionales del sistema penal en todos sus estratos pierde con preocupante habitualidad las vías naturales de expresión del reclamo o del disenso buscando respuestas inmediatas que satisfagan los requerimientos de sectores sociales que reaccionan ante el silencio, cuando no el incentivo, de quienes debieran transmitir sin hesitaciones, con claridad, una voz de censura a esta multiplicación de violencia a la vez que instar a una actitud coherente con la vigencia de una democracia plena y comprometida con el respeto de los derechos humanos.
Lamentablemente, en estos días también se observa que la opción por la gratificación instantánea del reclamo se expande incluso a la vida académica y en varias facultades de derecho se urgen desde distintos estamentos rápidas suspensiones, separaciones o exclusiones de miembros del claustro docente sin brindarles siquiera la mínima expresión del derecho defensa –que sería el descargo en sede administrativa–, sobre la base de actos que corresponden a otra incumbencia profesional, incluso ocurridos prácticamente once meses atrás sin que provocaran interferencias en el rol docente hasta que ocuparan el interés mediático.
Hacemos entonces un nuevo llamado a la cordura, al respeto institucional y al compromiso de todos para evitar sigan sucediendo o prohijándose estos brotes de violencia o apartamiento de los canales y pasos institucionales vigentes, que sin dudas hieren profundamente la cohesión de la convivencia social y nos alejan del Estado de Derecho. Marcelo Riquert-Presidente Mariano Buffarini-Secretario
Buenos Aires, 27 de mayo de 2015.

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